Hoy debíamos retomar el contacto virtual (paradoja moderna) con nuestros alumnos, pero nuevamente estamos los docentes en lucha.
Sé que hay muchos que dicen que no sirve de nada, seguir trabajando y undiéndonos día a día en la pobreza tampoco veo que sea el camino.
La indignación y la bronca debe llegar a la sociedad que debe enterarse que el estado hace uso de la pandemia para jugar con la educación y con los educadores a su antojo.
Tenemos para contarle que a la ministra que la vendieron como una profesional de renombre lo único que hizo es ningunear a la docencia impulsando cierres de carreras docentes, cierres de cursos, designaciones desvergonzadas, compras y pagos millonarios en cuestiones no fundamentales, y puedo seguir pero los aburriría.
En el año del famoso congreso pedagógico, tenemos esta realidad: un ministerio que asume el compromiso de la cláusula gatillo (que no fue el mejor acuerdo porque sabíamos que algo íbamos a perder), hoy dice que no dispone de los recursos y se excusa en la pandemia.
A eso vale aclarar, el supuesto aumento de la paritaria nacional es solo un monto en negro que además se da en cuota y que no hay certeza que pase a quedar en el sueldo.
Por todos esos docentes que esperan su designación, que ni siquiera les permitieron cobrar el IFE por la incompetencia estatal, por la demanda y desafío que significa educar en este contexto, porque justicia social no es solo ayudar a los desfavorecidos sociales sino también dignificar toda la clase obrera, no hundirlos en la pobreza. Por todos estos motivos y más, hoy se para!