Carlos Alabe: “MALDITO COVID 2020”

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Amigos, estimados, enemigos, compinches, conocidos, etc de mi vida, quiero avisarles que Gracias a Dios pude superar al Covid-19 y tengo el Alta Médica para seguir en carrera.
Pase unos días horribles, con dolores, fiebre, angustias, mareos y enojos conmigo, con la vida y con todo. Este bicho es una porquería, por favor CUIDENSE! hagan de cuenta que todos estamos infectados y protéjanse al máximo. Es una maldición.
Quiero agradecer a los que se ocuparon de mi, al Dr. Nicolas Ivancovich (Un Capo total) me llamo todos los días y hasta me mando su Equipo un domingo a las 11 de la noche porque me sentía muy mal; la Dra. Clarita Sercic, que se vino hasta mi casa me atendió y en la vereda me hizo una receta (Otra Capa); la Dra. Mariel Quintana y su grupo de médicos, a la Gente de Salud Publica por los llamados y el profesionalismo; a Laura Rivera por sus viandas y Reiky; a Amilcar por sus mandados y comidas; a mi Amigazo Kato Moro y Pablito, su hijo que me asistieron como a un hermano, a los que no me llamaron por teléfono para no molestar, Mil Gracias!!. A la Arquitecta Susana Geat por su comprensiva y humanitaria actitud; a mi Hermanito Pepin; a mi Amigo Manuel que la paso re contra mal con su amada Aura; a Silvana Mc Lean; a Vivi Barrionuevo; a Chiquitin Caputo; a Pablito; a Miguel Gonzalez que pese a sus bolonquis se puso a disposición; al grupo tapitero de todo el país que desde cada rincón pidieron por mi y me mandaron muchas fuerzas y a la Gente que no conozco que me enteré que rezó por mi y con sus oraciones aliviaron las noches de dolores sin calmantes; a Patricia Gavilán y la Gente de Fundacion Garrahan que se preocuparon y ocuparon de mi gravedad y un Gracias muy especial a Celeste por ser incondicional ocupándose todo el tiempo de mi estado y atentiendome durante todo el proceso.
A todos, MIL GRACIAS!! Fue un proceso duro, desesperante y angustiante que a cualquiera le puede pasar por eso les pido que se Cuiden porque los quiero mucho!
Gracias a los médicos y enfermeros por tanto. Gracias Dios mío por darme otra oportunidad. Amén.